El revolucionario Pratone: un chaise longue que cambió la historia del diseño radical en la década de 1960s

En este artículo, nos adentraremos en la fascinante historia detrás del «Pratone», un chaise longue que revolvió los cimientos del diseño radical en la década de 1960. Diseñado por Pietro Derossi, Giorgio Ceretti y Riccardo Rosso para la firma italiana Gufram, este mueble revolucionario desafió las convenciones del interiorismo de la época con su forma audaz y innovadora.

Con sus falsos tallos de hierba de espuma de poliuretano que rodean el asiento, el Pratone es un verdadero icono del diseño radical. En este artículo, exploraremos cómo este chaise longue cambió la historia del diseño interior y cómo su innovación y creatividad han inspirado a generaciones de diseñadores y aficionados al arte.

A continuación, profundizaremos en los detalles detrás del diseño y la fabricación del Pratone, incluyendo su proceso de creación a mano y la patente especial que requiere. También analizaremos cómo este mueble ha sido reconocido como un icono del diseño radical y cómo forma parte de las 100 Obras Maestras de la colección del Vitra Design Museum.

Diseño innovador y radical

En la década de los 60, el diseño se encontraba en una encrucijada. Después de la segunda guerra mundial, la sociedad occidental estaba experimentando un crecimiento económico y social sin precedentes, lo que llevó a una mayor disponibilidad de recursos para la creación de arte y diseño. Sin embargo, al mismo tiempo, la tradicional cultura del diseño europeo se sentía rígida y conservadora, limitada por las convenciones establecidas y la influencia del Art Decó. Fue en este contexto que emergió el diseño innovador y radical, un movimiento que buscaba romper con las normas y crear algo nuevo, fresco y revolucionario.

El chaise longue Pratone fue uno de los primeros ejemplos de este tipo de diseño. Diseñado por Pietro Derossi, Giorgio Ceretti y Riccardo Rosso para la firma italiana Gufram en 1966, Pratone se caracterizaba por su forma inusual y provocadora. En lugar de un asiento tradicional, Pratone presentaba un bloque de césped con falsos tallos de hierba de espuma de poliuretano que rodeaban el espacio para sentarse. Era un objeto que cuestionaba los conceptos tradicionales del diseño y la función del mobiliario.

Pratone no solo innovó en su forma, sino también en su fabricación. Requiere una técnica especializada y cinco semanas de trabajo manual para completar cada pieza. La pintura especial patentada Guflac utilizada para lograr una apariencia similar al cuero fue otro elemento clave en el diseño del chaise longue. El resultado era un objeto que no solo era atractivo visualmente, sino también tangible y sensorial. Al sentarse en Pratone, uno podía sentir la suavidad de la espuma y el tacto familiar de los tallos de hierba.

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El impacto de Pratone en el diseño radical fue significativo. Fue un objeto que abrió las puertas a una nueva generación de diseñadores experimentales, inspirados por la libertad de creación y la innovación que ofrecía. A medida que el diseño radical continuó evolucionando, otros objetos como el chaise longue Sedia di Recupero de Franco Albini y la silla E1027 de Ettore Sottsass se convirtieron en iconos de la nueva vanguardia del diseño italiano. En retrospectiva, Pratone puede ser considerado un catalizador para este movimiento, demostrando que el diseño podía ser innovador, radical y atractivo al mismo tiempo.

Creación en 1966 por Gufram

En 1966, el año en que la revolución cultural y social estaba en plena ebullición, Gufram, una empresa italiana de mobiliario, lanzó Creación, un chaise longue que cambiaría por siempre el panorama del diseño radical. Diseñado por Pietro Derossi, Giorgio Ceretti y Riccardo Rosso, este mueble revolucionario se llamaba Pratone, nombre que reflejaba su forma de bloque de césped con falsos tallos de hierba.

La Creación de Pratone no se limitó solo a su diseño audaz, sino que también introdujo una nueva tecnología para su fabricación. La empresa italiana desarrolló una técnica especial patentada llamada Guflac, que permitía pintar la espuma de poliuretano con el fin de crear un material que pareciera cuero. Esta innovadora tecnología permitió a los diseñadores experimentar con formas y materiales nunca vistos antes en el mundo del mobiliario.

Pratone no solo cuestionó los cánones del interiorismo, sino que también se convirtió en un icono cultural de la década de 1960s. Su forma única y su materiales revolucionarios lo hicieron un objeto de deseo entre la intelligentsia y el underground italiano. Pratone se convirtió en una referencia para aquellos que buscaban algo nuevo, emocionante y radical en el mundo del diseño y el arte. Hoy en día, Pratone es considerado un icono del diseño radical y forma parte de las 100 Obras Maestras de la colección del Vitra Design Museum.

Características únicas: hierba de espuma y cuero

Características únicas: hierba de espuma y cuero

El Pratone es conocido por sus características únicas que lo convirtieron en uno de los iconos del diseño radical de la década de 1960s. Uno de los aspectos más innovadores del Pratone es su superficie, compuesta por hierba de espuma de poliuretano que rodea el asiento y los brazos. Esta hierba artificial recrea la textura y el color natural del césped, lo que da al mobiliario un aspecto sorprendentemente realista. La elección de esta materia prima no solo era una innovación en el terreno del diseño, sino que también permitió a los diseñadores experimentar con nuevos materiales y técnicas.

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La otra característica única del Pratone es su «cuero» especial patentado por Guflac. Este tratamiento especial permite darle al mobiliario una apariencia similar al cuero, pero sin la necesidad de utilizar material auténtico. La pintura especial se aplica a mano durante un proceso que requiere una gran dedicación y precisión, lo que hace que cada pieza sea única. El «cuero» del Pratone no solo es visualmente atractivo, sino que también proporciona una textura suave y cómoda para sentarse o tender.

La combinatoria de la hierba artificial y el «cuero» patentado por Guflac da al Pratone un aspecto único y revolucionario en el momento de su lanzamiento. Esta innovación permitió a los diseñadores Pietro Derossi, Giorgio Ceretti y Riccardo Rosso crear un mobiliario que no solo era bello, sino que también desafiaba los cánones del diseño tradicional. Hoy en día, el Pratone es considerado uno de los iconos del diseño radical y se puede ver como una pieza central en la historia del diseño contemporáneo.

Impacto en la historia del diseño

El Pratone no solo fue un mueble innovador, sino que también tuvo un impacto significativo en la historia del diseño. En el contexto de la década de 1960, cuando el diseño se encontraba en pleno proceso de evolución y experimentación, el Pratone se erigió como un símbolo de ruptura con los cánones tradicionales del interiorismo. Su forma abstracta y su materia prima innovadora, como la espuma de poliuretano, cuestionaron las nociones establecidas sobre la estética y la función del mobiliario.

El Pratone también desafió las limitaciones técnicas y los costos asociados con la producción de muebles. La fabricación a mano y la pintura especial patentada Guflac requerían un proceso laborioso y caro, lo que lo convirtió en un objeto de lujo y exclusivo. Sin embargo, este reto técnico también permitió a los diseñadores explorar nuevos materiales y técnicas, lo que tendría un impacto duradero en el desarrollo del diseño en la década siguiente.

Además, el Pratone se convirtió en una figura icónica de la avant-garde italiana, inspirando a otros diseñadores y artistas a experimentar con nuevas formas y materiales. El diseño radical y experimental que encarnaba el Pratone influyó en la creación de otros muebles innovadores y objetos de arte, como las obras de designers como Ettore Sottsass y Alessandro Mendini, que también trabajaron para Gufram.

El Pratone no fue solo un mueble revolucionario, sino que también tuvo un impacto significativo en la historia del diseño. Su innovación material, su forma abstracta y su proceso de producción laborioso cuestionaron los cánones tradicionales del interiorismo y abrieron el camino para nuevas formas y materiales en el diseño radical de la década siguiente.

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Icono del diseño radical

En los años 60, el diseño radical se convirtió en una tendencia que revolucionó el mundo del interiorismo. Entre los iconos de esta época, uno de los más influyentes y emblemáticos es el Pratone, un chaise longue diseñado por Pietro Derossi, Giorgio Ceretti y Riccardo Rosso para la firma italiana Gufram en 1966.

El Pratone se caracteriza por su forma inusual, que recuerda a un bloque de césped con falsos tallos de hierba de espuma de poliuretano que rodean el asiento. La fabricación de este mueble revolucionario requiere una gran cantidad de tiempo y esfuerzo, ya que se tarda cinco semanas en realizarla por mano. La pintura especial patentada Guflac se utiliza para lograr la apariencia similar al cuero, lo que da al Pratone un toque exclusivo y sofisticado.

El diseño radical del Pratone cuestionó los cánones del interiorismo de los años 70, apostando por la innovación y la creatividad en el diseño de mobiliario. Su forma geométrica y sus materiales revolucionarios lo convirtieron en un icono del movimiento de diseño radical, que buscaba romper con las tradiciones y crear algo nuevo y emocionante. Hoy en día, el Pratone es considerado una obra maestra del diseño radical y forma parte de la colección del Vitra Design Museum, uno de los más importantes museos de diseño del mundo.

Conclusión

La legado de Pratone es tangible en el mundo del diseño y del interiorismo. A medida que las décadas pasan, su influencia se puede ver en muchos proyectos y estilos que buscan innovación y creatividad en el diseño de mobiliario. La originalidad y la audacia con que se diseñó Pratone han permitido que este chaise longue se convirtiera en un icono del diseño radical y en una referencia obligada para cualquier diseñador o interiorista que busque inspiración.

Además, Pratone es un ejemplo paradigmático de cómo el diseño puede ser utilizado como un medio para cuestionar los cánones establecidos y desafiar las normas. En la década de 1960s, su llegada revolucionó el panorama del diseño italiano y ayudó a darle una nueva dirección al movimiento design radical. Su legado también se puede ver en la creciente tendencia hacia la experimentación y la innovación en el diseño de mobiliario que ha sido un característico de las últimas décadas.

Pratone es más que un simple chaise longue: es un símbolo del poder del diseño para cambiar la historia. Su legado es un recordatorio del impacto que puede tener una buena idea en el mundo del diseño y del interiorismo, y su influencia continúa inspirando a diseñadores y interioristas de todo el mundo.

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